jueves, 6 de diciembre de 2012

Silencio.

La intensidad de los secretos. Lo que te puede deshacer un día. Morir de a poco es callarte. El dolor de coserse los labios. Solo para no dañar. No dañar cuando todo esta dañado ya. Con coraje, con dolor. Todo al final mata. Esta vez no hay un final. O supongo que mi final es a diario. Salieron heridas mas de la cuenta. Aunque digan que nadie muere de esto. Los enfermos nos entendemos. Vivir con la realidad. Eso es vivir con lo que se tiene. Pisotearte al dolor. Y que a veces… el te pisotee a ti.


miércoles, 5 de diciembre de 2012

Nunca nadie.

Yo creo que nunca nadie te va a llegar a querer como yo.

—¿Porqué?

Porque lo que te quiero es demasiado y nadie va llegar a tanto.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Perdón, pero dudo.

Dudo porque puedo, y porque te conozco. Incluso mas de lo que me gustaría. También dudo por miedo. Miedo al dolor. Todos nos enfermamos. Pero quizá yo no quiera. ¿Puedo huir? Es demasiado tarde lo sé.. pero esto envuelve, mírame, te extraño en las noches, y te odio por las mañanas.

lunes, 12 de noviembre de 2012

Me extraño piedra.

Me extraño, pero no me recuerdo. Me veo lejana y casi imposible. Necesito la seguridad de antes. Te necesito a ti. Creí que me era imposible querer, después me llegaste tu. Con todas esas complicaciones. Te disfruto hasta los defectos. Me gustaba tenerte y sentirme vacía. Ahora, después de un tiempo nose sí el vacío es porque te extraño. Yo era esa. Esa que se sacaba los sentimientos tal cual una bulimica a la comida. Me gustaba verte. Verte y no sentir nada. Tan simular a una piedra. Ya sabes lo que dicen, una piedra nunca sangra. Me enferma el miedo. Me da miedo querer(te). No quiero sentir. No quiero que me veas. No así.